El gigante de la telefonía suspendió el 2 de septiembre la venta del que debía convertirse en su “phablet” estrella (dispositivo entre el smartphone y la tablet) por la explosión de algunas de sus baterías durante la recarga.
A principios de este mes, Samsung suspendió, como medida preventiva, las ventas de Galaxy Note7 mediante la actualización del software para reducir el riesgo de explosión de estos smartphones defectuosos, según el anunció realizado por la compañía en los diarios surcoreanos, después de que estos fallos desataran un escándalo mundial.
A pesar que la empresa indica que el número de incidentes registrado en el mundo es muy pequeño, ha sugerido las siguientes medidas: Han enviado un mensaje directo a todos los dispositivos Note7 que han sido activados en Europa, solicitando que apaguen sus teléfonos y los devuelvan al punto de venta a la mayor brevedad posible. Y a través de www.samsung.com y www.samsung.es han proporcionad información de respaldo a los que han adquirido estos dispositivos. Y están coordinando con sus partners y distribuidores para garantizar que los clientes de Note7 puedan reemplazar su dispositivo. Información que deben tomar en cuenta si es que no han realizado el cambio aun por uno nuevo, a partir del lunes 19 de septiembre se están aproximando a las oficinas correspondientes.
Tras una rigurosa inspección, esperan que el problema de la batería haya quedado completamente resuelto en los dispositivos de reemplazo Note7, que llevarán un distintivo en la caja, que identifica claramente que el smartphone forma parte de los nuevos dispositivos puestos al mercado.
La actualización del Galaxy Note 7 limitará la recarga de las baterías al 60%, con el objetivo de evitar el sobrecalentamiento y la eventual explosión de las mismas. Esta actualización se está ya automáticamente desde el 20 de septiembre.
Anecdóticamente, a pesar que la empresa está invitado a los usuarios a devolver su “phablet” a cambio de otro teléfono provisional, en espera de que les sea entregado un nuevo Note 7, muchos de los usuarios se habían negado a cambiar su Note 7 nuevo por otro dispositivo más antiguo, incluso a riesgo de verlo explotar.
Ahora bien, ya han sido registrados 35 accidentes, entre los cuales está el del niño de seis años de Brooklyn que tuvo que ser llevado de emergencia al hospital luego de que el Galaxy Note 7 le explotara mientras jugaba, publicado en un reporte del New York Post. De acuerdo con la abuela de la víctima, el incidente se produjo mientras el niño veía videos en el teléfono. El pequeño recibió el alta horas después.
Desde que se difundieron las primeras imágenes de teléfonos que se derritieron por fallas al ser cargados, afectaron a Samsung en la bolsa de Seúl, sus acciones cayeron un 7% entre el viernes y lunes al cierre, hasta 1,46 millones de wons (unos 1.318 dólares), alcanzando su nivel más bajo en dos meses.
“A la luz de los recientes incidentes y preocupaciones planteadas por Samsung acerca de sus dispositivos Galaxy Note 7, la Administración Federal de Aviación recomienda encarecidamente a los pasajeros que no enciendan o carguen estos dispositivos a bordo de aeronaves o en el equipaje facturado”, indica el documento difundido a través de todos los medios electrónicos de la FAA.
Se conoció que varios usuarios de Qantas Airlines dieron a conocer que la aerolínea australiana está pidiendo a los viajeros antes del despegue de cada avión que no carguen su móvil.
El aviso fue emitido casi una semana después de que Samsung decidiera recoger los teléfonos con las baterías afectadas e iniciar el programa de recambio.
Entre otro de los relatos, Nathan Dornaches, fue quien contó que dejó su Note 7 cargando en el interior de su Jeep Grand Cherokee y cuando volvió, su vehículo estaba consumido por las llamas del fuego.
“Las baterías de iones de litio tienen mucha potencia en un pequeño volumen. Cuando se recalientan y estallan, las consecuencias pueden ser graves”, señaló la Comisión estadounidense que dice trabajar con Samsung para organizar el retiro formal del mercado de los aparatos “tan rápido como sea posible”.
Varios reportes de la última semana en varios medios de prensa aseguran que Samsung habría decidido no utilizar sus propias baterías en el Galaxy Note 7 de sustitución que ha comenzado a entregar a los usuarios.